El Monumento al General Morán
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Ya desde 1924, se venía exigiendo su pronta inauguración, como se muestra en esta nota del diario EL Deber del 7 de agosto de ese año, donde el Colegio de Abogados por intermedio de su decano, el señor Alberto Rey de Castro apuraba al gobierno .
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Invitaciones a la ceremonia del 6 de febrero, en el Diario El Deber.
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El antiguo diario “El Deber” narra los sucesos de la inauguración dos días después (8 de febrero de 1926) como sigue:
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El sábado 3 de febrero, a las 3 pm. Se realizó la ceremonia de inauguración del monumento al General Trinidad Morán, monumento levantado al comienzo de la hermosa y amplia avenida Leguía, en actual construcción.
El homenaje y reparación tributados al héroe de Ccolpahuico, han sido brillantes y justicieros, y han estado en armonía con la majestad y gloria de ese prócer.
Con efecto en dicha ceremonia han participado las autoridades civiles, religiosas, judiciales y militares; los representantes de todas las instituciones sociales, comerciales y obreras y el pueblo en general, formado por enorme gentío.
De este acto, vamos a dar a continuación, información detallada, que apareció en la edición del 8 de febrero en el Diario El Deber del año 1926.
A las 2 y 12 pm. Comenzaron a llegar al Salón de Sesiones del concejo las autoridades locales presidentes de instituciones y otras personas, especialmente invitadas para la ceremonia. Comisiones especiales de concejales acompañaron de su residencia al Concejo, al Iltmo. Obispo y al Sr. Prefecto y comandante General. De allí se dirigieron en numerosos autos particulares y de la plaza y en tranvías a la avenida Leguía.
Frente al monumento, y formando dos hileras, se colocaron sillones que fueron ocupados por la concurrencia oficial.
Vimos al Obispo de la Diócesis, Iltmo Rvmo Mons. Fray Mariano Holguín; al prefecto del Departamento y comandante General: coronel Señor Leopoldo Arias; al presidente de la corte Superior de Justicia: señor doctor Manuel B. Valdivia; Alcalde del concejo Provincial señor doctor : Manuel Castañeda : Vicario General de la Diócesis y Pronotario apostólico Adnstar Partipantium , Monseñor Manuel N. Silva, Provisor de la Diócesis Monseñor Eusebio Valencia; Jefe de la oficina Plesbisciaria de esta ciudad , Monseñor Vitaliano J. Berroa; Canónigo Velásquez Uría; Sub prefecto del Cercado señor Jorge Robinson, Cuerpo consular de Arequipa, con su decano señor J.A.L. Vivanco, cónsul del Brasil , cónsul de Venezuela en Arequipa y nieto del Prócer, señor Teodoro Barclay ; Vocal de la corte, Señor doctor Daniel Lucas; Prior del Convento de la Recoleta, Fray Buenaventura Uriarte, Secretario General de la Diócesis , señor M. Cáceres Zeballos; Administrador de correos , Señor Luis A. olivares; Presidente de la Cámara de Comercio, señor Juan Barclay; Presidente de la Asociación de comerciantes de Arequipa, señor Carlos Lucioni V. Presidente del Club Internacional de Arequipa de Tiro al blanco, señor doctor Francisco Gómez de la Torre; director de Beneficencia , señor Emilio Rivera , Presidente del club Arequipa, señor Manuel Ugarteche; señor César Bustamante , presidente de la Sociedad Patriótica Tacna, Arica y Tarapacá; señor doctor J. Eduardo Vargas, en representación del Concejo Provincial de Puno; señor doctor José Julián González Ramírez, en representación del Concejo Provincial de Ilo; Jefe de las tropas del Cuerpo de Seguridad de la región, Mayor Elías Rosas Morán; R.P. fray Enrique Rodríguez , Director del colegio San Francisco; señor Ismael Soto Landázuri, Presidente de la Unión Fraternal de Empleados del Ferrocarril; señor doctor Benigno Lozada, Párroco de Caima; señor Benjamín Pacheco, Presidente de la Sociedad Auxilio Mutuo y Francisco Tenorio miembro de la misma, señor doctor José Zamudio, en representación del Club Unión de Puno y muchas otras personas cuya nómina completa es imposible recordar.
Estuvieron en representación del Colegio de Abogados, los señores doctores Francisco Mostajo, Alberto Rey de Castro, Manuel S. Mostajo, Manuel Pío Chávez, M. Zenteno Corrales y Pedro Germán Delgado.
Vimos a comisiones de los consejos distritales de Tingo, Tiabaya, Paucarpata y en corporación a los de Miraflores con su alcalde señor José D: Muñoz Nájar; y de Caima con su alcalde señor Aurelio Salinas.
Concurrieron con sus estandartes comisiones de varias sociedades; Coalición Obrera de los Barrios, Federación de Zapateros, Club de tiro Miraflores, etc.
Ocuparon sitios preferenciales las siguiente señoras, señoritas y señores descendientes del Héroe Trinidad Morán.
Nietos:
- Señor doctor Max. Guinassi Morán. (Cónsul de Venezuela). Doctor Luis Guinassi Morán, Señor Rafael Guinassi Morán.
- Señora Celia Guinassi de Belaunde.
- Biznietos:
- José M. A. Corso.
- Alberto Belaunde Guinassi.
- Hernán Belaunde Guinassi.
- Alfredo Belaunde Guinassi.
- Manuel Belaunde Guinassi.
- César Belaunde Guinassi.
- Pedro Belaunde Guinassi.
- Raquel Belaunde Guinassi.
- Mario Guinassi.
- Doctor J. Enrique Bustamante y Corso.
- Niñas, Rosa, Antonieta y Pepe Corso Romaña.
Relacionados:
- Señora María Zereceda de Belaunde, señorita Isabel Echegaray y Zereceda.
Concurrieron, también los miembros del Estado Mayor, con su jefe comandante señor Jesús Ugarte y los miembros del Cuerpo de Sanidad Militar.
Formaron uniformados de campaña las tropas del ejército acantonadas en la plaza, las cuales se desplegaron en esta forma:
El monumento en la Avenida Leguía, más tarde llamada Ejército.
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A la derecha, mirando al monumento del General Trinidad Morán, el Regimiento de Infantería N° 5 en la línea; a la izquierda la Artillería de Campaña y la Artillería de Montaña N° 3 acantonada en Tingo, formadas ambas en batalla; detrás del monumento. Caballería Regular del 1 en batalla, Regimiento de Infantería N° 7 en línea de secciones de a tres. Detrás del monumento a la izquierda, formaron, también las tropas del Cuerpo de Seguridad.
Mandó las tropas el Jefe de la Artillería de Montaña comandante Tomás Azpilcueta, actuando de ayudantes los capitanes Federico Gómez y Arnaldo Quevedo.
El monumento estaba adornado con palmeras y banderines nacionales. A ambos lados de las bases del monumento se colocaron unas urnas, las banderas del Batallón Libres de Arequipa que actuó en 1834 a 1836 y Batallón Vargas que peleó en Ccolpahuaicco, ambos a órdenes de Morán.
El golpe de Vista de la Avenida Leguía, en esos momentos magnífico y soberbio, pues además de la concurrencia oficial, una masa compacta de pueblo ocupaba ambos lados de la Avenida y los lugares dominantes. Los hermosos chalets levantados en esa avenida estaban ocupados por numerosas familias. La concurrencia puede calcularse en varios miles.
Comenzó la ceremonia con el himno nacional tocado por las bandas militares del 5 y del 7.
Acto continuo, el Prefecto del Departamento y Comandante General señor Leopoldo Arias, descorrió el velo que cubría la hermosa obra de arte que perpetuará la memoria del General Trinidad Morán, en la actitud propia del héroe, vibrante en el espacio la espada recién desenvainada y con el gesto y el porte de los valientes. En ese momento, la banda del 7 tocó el Himno Nacional de Venezuela y las tropas presentaron armas.
Enseguida, el coronel Arias dio lectura a un concentuoso discurso, recordando la personalidad del Héroe y entregando al Municipio, representado por su alcalde doctor Castañeda el monumento que lo inmortalizará, entrega que hizo a nombre del Presidente de la República señor Augusto B. Leguía.
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He aquí dicho discurso:
IItmo Señor Obispo,
Señores:
Ya que será una realidad el justo afán de la República de Venezuela de retirar de Cayma los restos del Benemérito General Morán para darle reposo definitivo en el regazo de la madre Patria, el Supremo Gobierno no ha querido que Arequipa quede sin un recuerdo patente de los méritos del heroico libertador que hizo de esta ciudad la tierra de sus afectos más hondos; y por ello es que no ha vacilado en obsequiar el monumento cuyo velo acaba de descorrerse. El Señor Presidente de la República sabe que en esta forma no solamente se perpetúa la memoria de los que contribuyeron con sus hechos y con su sangre a la formación de nuestra nacionalidad, sino que así se hace a los pueblos la sagrada advertencia de que es obligatorio conservar dentro del pecho de todo peruano el fuego que hizo héroes de nuestros antepasados, cuando las asechanzas y los peligros ofrecían penosa, casi imposible, nuestra organización, en pueblo de hombres libres. Y la elocuencia de la gentileza del Señor Presidente de la República es tanto más grande, cuanto que en estos momentos de prueba todos los peruanos debemos hacer un llamado a lo más hondo de nuestras conciencias y a lo más noble de nuestros sentimientos …. Además, las glorias de los que nos dieron independencia y salud no sólo deben ser cantadas en la epopeya, sino testimoniadas por las piedras y los bronces imperecederos que avivan los afectos patrióticos que quisieran adormecerse y llenen de legítimo orgullo a las generaciones por venir.
La biografía del General don Trinidad Morán se halla difundida, por suerte en los ámbitos de América. Historiadores severos nos dicen la gloria de sus campañas, destacando la maravilla de sus primeras armas allá en el suelo patrio, cuando todo intento de sus actividades al lado del gran bolívar; patentizado sus primeros pasos en nuestro país con el ejército Libertador; exaltando el más grande de sus hechos; la defensa de Ccollpahuaicco que propició el éxito de la batalla de Ayacucho y demostrando su amor al país que convirtió en patria adoptiva, cuando quiso verle grande y unido a la República del altiplano ; y si no fueran bastantes los testimonios de esos historiadores , aquí tenéis ,delante , estas enseñanzas que el pueblo de Arequipa guarda celosamente: la una, un estandarte del Batallón “Vargas de la Guardia” que comandará Morán en Ayacucho y la otra, emblema de sus campañas confederacionistas.
Señor alcalde:
Como representante de don Augusto B. Leguía, nuestro egregio mandatario, os entrego este monumento que perpetuará glorias bien ganadas y que estimulará el pueblo que lo recibe a continuar por el camino que nos señalaron los padres de la Patria.
Contestó el Señor Alcalde con el siguiente discurso, pintado en galanas frases, los rasgos épicos del General Morán, tanto en vida como en los instantes supremos de mostrar su pecho al plomo homicida .al terminar fue calurosamente aplaudido.
Señor Coronel Prefecto
IItmo Señor Obispo.
Señores:
Era un deber para el Perú que se erigiera en Arequipa este monumento. El Supremo Gobierno con espíritu nacional, lo ha comprendido así y esta la hora en que se cumple acto de gratitud y de justicia.
No he de hacer la biografía del General trinidad Morán. Todos conocéis seguramente, la figura histórica del bravo militar venezolano. No voy tampoco a presentaros su personalidad. Palabra de artista, inspiración de poeta, exige el delineamiento del héroe. Entre humo del combate de las clásicas batallas aparece en primera fila el notable muchacho, enamorado de la libertad, desafiando la muerte con el semblante iluminado por el sueño de gloria; y allá, el 3 de diciembre, del gran año de américa vedlo en Ccollpahuaicco al frente del batallón inmortal trazando el brillante prólogo de la epopeya de Ayacucho.
Y pasaron los años y Morán fue nuestro, fue peruano. Encontró aquí en esta hermosa tierra, tan llena de atractivos a la mujer amada y a la vez que formaba el hogar de nobles prestigios, luchaba con gentil arrogancia de patriota en la inquietante brega de la formación de la República.
Tiempos dramáticos fueron aquellos de mediados del siglo último en Arequipa. La contienda civil no deja un momento de reposo; es el movimiento inconsciente de la sociedad que va a organizarse. Día a día se yerguen los caudillos, el pueblo se apasiona, acude con el arma si brazo, al somatén que lo convoca, levanta las barricadas y con extraño gesto de altanería y de audacia derrocha la vida en la sangrienta brega.
Y fue en uno de esos momentos de ofuscación y de tumulto en que cayó el héroe. El patíbulo no había desaparecido de la escena política y se pronunció la sentencia de muerte. Arequipa toda la ciudad, sus nobles damas, prontas siempre para todo movimiento de generosidad y de justicia acudieron con vehemente afán para contener al atentado; pero la autoridad, imbuida por el criterio sanguinario de un tiempo, fue inflexible a la voz de la gratitud y de la justicia.
Doloroso cuadro. Al son de la marcha fúnebre que se ha hecho histórica, rodeado de soldados para el héroe bajo los balcones de su hogar. Ni el dolor supremo de la despedida de la esposa que queda allí transida de angustia, ni la indignación del crimen que se comete debilitan la serenosidad del héroe. Se retuerce sin duda el corazón y está tranquilo y mira de frente a la muerte.
Nuestra plaza de Armas tiene la consagración de ese fusilamiento; allí también cayó Salaverry, la sangre de esas víctimas nos dice de años a la patria, de noble valentía y de superioridad moral ante la muerte.
El patíbulo que redime al criminal y al malvado, es apoteosis para el héroe. La gloria parece tener celos del mundo; a sus predilectos los hace mártires.
¡Qué extraño misterio! Aquí mueren en el patíbulo Salaverry y Morán en Colombia cae bajo el hierro homicida Córdova, La Mar muere en el ostracismo, Sucre es víctima de horrendo crimen y Bolívar el líder de estos grandes hombres, el genio creador de la libertad de América muere en la soledad de San Pedro Alejandrino.
Con emoción señores, con profunda emoción levantemos el espíritu ante el recuerdo de estos grandes hombres, flor de la raza cuyas personalidades surgen del sepulcro como las más altas cumbres de la historia de América.
Hace cerca de un siglo un hombre ilustre caía en el patíbulo de la plaza de Arequipa; hoy la estatua de ese hombre se yergue con aclamaciones de triunfo. Es que ha llegado la hora de la gratitud y de la justicia.
El Obispo de la Diócesis Monseñor Holguín, habló como personero de la Religión. Dijo que el Patriotismo y la Religión son deberes inseparables y que por eso la iglesia ve con agrado y complacencia el homenaje que las sociedades tributan a su heroína. Una ovación cerrada epilogó sus últimas frases.
A nombre de la sociedad Patriótica Tacna, Arica y Tarapacá, se leyó este discurso el presidente de esta sociedad, señor César Bustamante, al cual fue muy aplaudido.
Señores:
La Sociedad Patriótica Tacna, Arica y Tarapacá que tengo el honor de presidir, ha querido asociarse, con toda su alma, a la solemne inauguración del Monumento a Morán, ofrecido por el Supremo Gobierno a esta bella ciudad de Arequipa, con la cooperación más entusiasta del Consejo Provincial de Arequipa; para perpetuar la memoria del ilustre venezolano que alcanzó en el Perú el grado de General, después de haber luchado hasta se consiguió sellar la Independencia de nuestro país.
Si debemos gratitud a los próceres de nuestra emancipación, que como peruanos ofrecieron su sangre por darnos libertad con mayores títulos a un extranjero que voluntaria y generosamente abandonó su patria para ofrecer su espada al servicio del ideal americano. Además, el General Don Trinidad Morán formó su hogar aquí y vivió todo el resto de su existencia en esta tierra, que era su segunda patria.
Casi desde su fundación la Sociedad que represento, ha honrado la memoria del General Morán iniciando romerías a Caima a la tumba donde yacían sus restos, y hoy que se levanta un monumento a su recuerdo, le ofrece esta modesta placa que simboliza nuestra admiración y gratitud para el ilustre venezolano que coadyudo a darnos patria libre e independiente.
El capitán Manuel A. Zegarra en representación de la III División Regional, conferenció sobre las acciones de armas en que actuó el General Morán.
Enseguida. El señor doctor Max. Guinassi Morán, nieto del héroe agradeció en un sobrio discurso al Presidente de la República, a las autoridades, al pueblo y a los que habían tomado parte activa en la erección del monumento a su ilustre antecesor y cuyo texto es el siguiente:
Iltmo. Sr. Obispo.
Sr. Prefecto y comandante General
Sr. Alcalde
SS.
El eco sonoro de los clarines de Ayacucho, aún no se había extinguido, su armonía propagada de cima a cima de los Andes , el cántico de triunfo , el himno a la Libertad de la América latina afirmada en el histórico campo, cuando en esta ciudad hace 101 años se hacía en acto solemne juramento de fidelidad a la causa de la independencia, a la que así como a las otras repúblicas bolivarianas, prestará importantes servicios desde las riveras del Orinoco hasta lejos muy lejos de las fronteras venezolanas, el General Trinidad Morán , al que la gratitud nacional de esta segunda patria, que él adoptara por el profundo afecto que por ella sentía, eleva al sitial de los inmortales al perpetuar su adhesión a la República y la memoria de sus acciones.
Al hombre de alto espíritu nacionalista, que rige los destinos de la Patria, que ama su pasado y se esfuerza en engrandecerla para el porvenir , poniendo a su servicio las múltiples manifestaciones de su vigoroso talento , al ilustre mandatario que acaba de formular programa de regeneración nacional ,diciéndonos que debemos “Ser militarmente fuertes para que no nos provoquen y constitucionalmente ordenados para que nos respeten” y “ que un pueblo débil se habitúa a la derrota y un pueblo anárquico es presa fácil de cualquier imperialismo”; van por esta estatua , por el erigida las expresiones de mi más imperecedera gratitud y las del sincero reconocimiento de mis hermanos.
Al ilustrísimo Prelado Monseñor Holguín, digno Obispo de la Diócesis, al pundonoroso Jefe del ejército Coronel Leopoldo Arias, distinguido Prefecto del Departamento, al prestigioso facultativo doctor Manuel Castañeda, alcalde del Concejo Provincial, al cuerpo Edilicio, a los miembros del Cuerpo Consular, al Instituto Armado y a todos vosotros que os habéis servido dar realce a esta ceremonia con vuestra asistencia, os digo: gracias, gracias mil.
Diario El Deber 6 de febrero de 1926. Avenida Leguía, hoy avenida Ejército.
Revista Mundial 1928. Avenida Ejercito.
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A la sociedad Patriótica Tacna , Arica y Tarapacá , en cuyos socios se mantiene intenso el más acendrado patriotismo debo aclaración de agradecimiento por haber sido la primera Institución social que organizará una romería a la tumba del Héroe y por ser ahora la que se adhiere a esta ceremonia colocando una placa conmemorativa en este monumento al que trae la expresión de su cariño al pueblo de Cayma , presidido por su entusiasta párroco Don Benigno Lozada y a su progresista Concejo : que rivaliza con el de Miraflores presenta en este acto teniendo a su frente a su distinguido alcalde señor José Domingo Muñoz Nájar y a los dignos delegados de los Concejos de Puno, Islay, Castilla , Cailloma e Ilo.
Estos mis sentimientos de afecto y agradecimiento los hago extensivos al ilustre Senado de la República. que acordará la erección de un busto a la memoria del Prócer secundando la iniciativa del culto abogado y distinguido Senador Dr. Eleodoro M. del Prado ; al ilustre colegio de abogados por sus múltiples iniciativas tendientes a que tributaran a la memoria del General Morán , diversos homenajes ; a la Sociedad de Beneficencia por su gestión para trasladar al Cementerio General sus veneradas cenizas ; al Colegio “Arequipa” que presidido por su talentoso Director el señor Juan C. Rossel y por su ilustrado Catedrático doctor Sixto Morales efectuara actuación de grato recuerdo ante la tumba de Morán ; al erudito escritor y hábil historiador doctor Francisco Mostajo , infatigable patrocinador de las reivindicaciones históricas a cuya labor le llevan su espíritu romántico y hasta preparación intelectual; y a los diarios “El Deber” y “El Pueblo” por su activa propaganda Pro Morán.
Dr. Eleodoro M. del Prado.
Avenida Ejército.
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Honrado con la representación consular de los Estados Unidos de Venezuela, la magna nación de las luchas libertarias, la tierra cuna del libertador en cuya gesta “Flotando iban hacia el porvenir como arca milagrosa ,los destinos de un mundo ,la fe la esperanza , el entusiasmo, todo lo que cabe de noble y portentoso en el pecho de un convencido que se dio a la tarea sublime de redimir y emancipar las fronteras del derecho y ensanchar los dominios de la Libertad” ,la que se honra con contar entre sus hijos héroes sublimes como el gran Mariscal de Ayacucho y tantos otros que fueron terror de las hispanas huestes , tengo en esta ocasión en la que los manes de los Libertadores flotan en torno de esta Estatua, que expresar a nombre del ilustre Presidente de la República de Venezuela , General Juan Vicente Gomes, ese gran patriota , ese hombre de carácter firme y de pujante energía para imponer y realizar el engrandecimiento y prestigio de la Patria , que está dignamente representada en el Perú por el hábil diplomático y prestigioso intelectual doctor don Rafael Villanueva Mata , el reconocimiento y la gratitud de la República , por este monumento que recompensa los esfuerzos de uno de aquellos de sus hijos que dejaran la Madre Patria para servirla mejor, conquistando de triunfo en triunfo nuevos laureles que ofrendarla.
Terminada la ceremonia ante los allí presentes, desfilaron las tropas en correcta formación recibiendo aplausos por su porte militar.
El monumento como se habrá visto por el fotograbado que publicamos en nuestra última edición, es hermoso. La estatua de bronce se alza sobre base hecha de piedra de granito. el Plano último de la base está cubierto con mosaico gris de la Fábrica de Cerámica de los señores Alfredo Forga y Cía. El cual se distingue por su matiz y consistencia de modo que la pavimentación de la Avenida Leguía son este mismo material presentará un elegante aspecto.
En el Frontis del Monumento en una placa de bronce se lee esta inscripción:
“General Trinidad Morán, de los Libertadores de Venezuela Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia. Héroe de Ccollpahuicco , Monumento erigido por S.D. Augusto B. Leguía. Presidente de la República, amparando acuerdo del Senado a pedido de D. D. Eleodoro M. del Prado. Centenario de Ayacucho 1924.”
En el lado opuesto, la sociedad Tacna Arica y Tarapacá ha colocado esta placa con la inscripción:
“La sociedad Tacna Arica y Tarapacá dedica esta placa a la memoria del ilustre venezolano General Trinidad Morán, Prócer de la independencia americana, cuya espada prestó al Perú eminentes servicios que consolidaron su libertad. Arequipa 6 de febrero de 1926”.
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Se colocaron sobre el monumento coronas de flores, enviadas por el Distrito de Cayma, lugar en que reposan los restos del General morán, por la Sociedad Auxilio Mutuo, por la señora Rosario Z. de Echegaray, sobrina sobreviviente del Prócer y por los sobrevivientes del prócer.
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Cuando el Monumento al General Morán perdió la vaina.
Aunque no se precisa con exactitud cuando ocurrió dicho evento en una noticia del 8 de mayo de 1965 en el diario El Pueblo se menciona que para la época carecía de la vaina del sable. Esto fue porque en algún tiempo un enajenado mental en un momento de crisis cogió unas piedras y las lanzó contra la figura del prócer, una de los proyectiles dio con tanta puntería a la vaina y la hizo caer por los suelos. La nota periodística continuaba diciendo que desde entonces el monumento perdió la vaina, y hasta la fecha no se reponía. Posteriormente suponemos que para la reinauguración del monumento en 1969 esta se repuso.
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La Reinauguración
El Monumento fue reinaugurado en gran ceremonial la mañana del 3 de diciembre de 1969, y fue colocado en la avenida que lleva su nombre en la urbanización León XIII en el distrito de Cayma, frente al crucero con la avenida Ejército y la Avenida Domingo Zamácola (hoy avenida Cayma). Actualmente permanece en el mismo lugar.
Reinauguración del Monumento en diciembre de 1969. (fotografía diario El Pueblo) Avenida Trinidad Morán.
Nota periodística del acontecimiento de diciembre de 1969.
2015 Avenida Trinidad Morán.
Marcha fúnebre Morán.
