Índice

    ******************

    Una "quinta en Arequipa" guarda relación con la acepción urbanística .Inicialmente designaba "la quinta parte de la producción" que el arrendatario entregaba al dueño de una finca; pero más tarde se aplicó la denominación de quinta a esa misma finca rústica, incluyendo sus palacios o casas solariegas, parques y granjas.  Estos espacios tomaban habitualmente el apellido del propietario o familia.


    En Arequipa existían numerosas quintas, las cuales se pueden clasificar en las quintas históricas (que guardan relación con algún hecho histórico) y las que de alguna u otra manera sobrevivieron al tiempo convertidas en nuevas áreas urbanas dedicadas a la vivienda y al hospedaje , de estas últimas  la más importante sin lugar a dudas es  la "Quinta Bates". 


    A inicios del siglo XX los contornos de la ciudad de Arequipa estaban cambiando, mucha de la campiña era absorbida  por la urbe. La ampliación de la calle Jerusalén en 1872, hizo que cambiará mucho el lugar, antiguamente la calle ,tenia solo 4 cuadras y un callejón sin salida (la faltriquera del diablo) el resto eran huertas y terrenos de cultivo.


    Para fines del siglo XIX una simpática señora anglo americana llegó a la tierra del Misti, para establecerse y proporcionar un albergue exclusivo para sus visitantes.

    Anna Bates en 1885 ( Fotografía estudio Carlos Heldt.) En el libro Un arte arequipeño : maestros del retrato fotográfico. Andrés Garay, Jorge Villacorta.

    ************************


    Anna Bates  nació como Ana Monteith en lo que entonces se llamaba Bath-on-Hudson, al norte del estado de New York. Viajó a Sudamérica con su padre quién era ingeniero ferroviario, el cual tenía un encargo en los campos de nitrato del vecino país del sur.

    Hubo controversia sobre si  era estadounidense, pero en el censo de 1880 figura como Anna Monteith, de 12 años de edad, cuyo padre era ingeniero. Las edades coinciden con el obituario de 1953 de la "Legendaria Posadera" en la revista Time. 

    Una carta de un huésped, también en Time, dice:

    Siempre había algún tipo de jaleo en marcha, normalmente una batalla entre la fogosa y vieja ama y los criados, acompañada de huelgas, paros [y] celos mezquinos... . Era un placer escuchar a Tia, con su lengua salada. Despedía a la mitad del personal y los volvía a contratar a la mañana siguiente. https://bathonhudson.blogspot.com/2009/04/fame-tia-bates.html

    ************





    Anna Bates ya en 1903 contó con una establecimiento  con mucho confort , restaurant, salas de  lectura, recepción y hermosos jardines, lo cuál fue muy atrayente para las personalidades, distinguidas familias y viajeros extranjeros que quisieran conocer más de la hermosa ciudad del sur del Perú.

    A la quinta de la "tía Bates" como era conocida, los extranjeros radicados en el país iban  atraídos por lo cómodo  y ameno del lugar , especie de añoranza d e las lejanas  patrias de otros mares , a pasar un momento solaz , de ameno  cambio de ideas, influenciados en gran parte, no solo por la cocina de sabrosas viandas cosmopolitas que sabia dirigir la señora Bates sino también por las sazonadas tertulias  que en la Quinta, amenizaba la jugosa y humorística conversación de la misma señora.

    La Quinta Bates 1930. Foto Postal  M. Mancilla.

    **************


    Para la década del 30 no había quien no conozca y estime a la señora Bates, conocida como excelente  anfitriona. Era conocida hasta en Estados Unidos, de tal manera que  los turistas extranjeros que suelen visitar anualmente la ciudad mistiana, sabían de antemano que  en la Quinta Bates es donde debían alojarse. 

    Lo mismo sucedía con eminentes personalidades literarias, políticas y científicas. Allí se hospedó Venizelos, el político más importante de la Grecia moderna, ejerciendo como primer ministro de Grecia en siete ocasiones, la primera en 1910 y la última en 1933 , visitaron también  la quinta Bates el General John J. Pershing (oficial del ejército de los Estados Unidos. Pershing es el único militar estadounidense que alcanzó en vida el rango de general de los Ejércitos, solo superado por George Washington) en 1924 y los príncipes Eduardo de Windsor y Jorge duque de Kent  en 1931  Allí hizo resonar su cálido verbo Noel Coward (actor, dramaturgo y compositor inglés), quién a su regreso a Estados Unidos  escribía junto con sus gratas impresiones del lugar en su periódico, un elogio exaltado a la señora Bates, diciendo de ella que era " La heroína de todo cuanto llegó a prestigiar su espíritu en Arequipa" . De todo ello, se explica que también nuestras más connotadas damas  escojan la Quinta Bates para alojarse en ella durante la época de estío, como a corto ejemplo podemos citar la estada veraniega que hizo la señora Francisca de Benavides , esposa del Presidente Oscar. R. Benavides en 1933.


    Anna Bates.



    En este Documental sobre el Perú, realizado por la MGM a color   y subido a  la plataforma de Youtube   , podemos apreciar algunas escenas de Arequipa y también a la Quinta Bates en todo su esplendor así como a su anfitriona la señora Anna Bates. Min. 4:34 a 5:41.


    Postal que muestra al embajador norteamericano Jhon J. Pershing, en la residencia del señor Luis S. Blaisdell  superintendente de los ferrocarriles en Arequipa en 1924, donde se alojó. https://eap.bl.uk/archive-file/EAP726-1-1-35-29


    El Señor William Collier diplomático norteamericano que visitó nuestra ciudad en 1927 y que fuese  incorporado como catedrático honoris causa a la Universidad Nacional de San Agustín, el 14 de julio de aquel año se hospedo en la Quinta Bates. (Diario el Deber del día 13 de julio de 1927).

    *********


     La Quinta Bates en 1937

    *******


    La Quinta Bates en el plano de Eduardo de Rivero 1940.

    ******


    Noel Coward.


    Eleftherios Venizelos (1864-1936)

    ***********************



    La quinta Bates a lo largo de su existencia bajo la dirección de la señora  Anna tuvo destacados visitantes, contar cada anécdota ocurrida en la Quinta sería muy difícil, no obstante  reproduciremos entre otras , una protagonizada por  uno de los personajes más populares de inicios del siglo XX, Robert Riplay, Aunque usted no lo crea: 




    ANTES DE SALIR DE NUEVA YORK, Ripley le había enviado un telegrama a Carmela, la "señorita de ojos oscuros de Lima " que había conocido en París. Le había prometido visitarla, nunca imaginando que llegaría a Perú. Luego se divorció y una asignación inesperada a Sudamérica. Cableó a Carmela y se disculpó por el retraso de dos años, pero le recordó que él era "un hombre de palabra" y dijo que esperaba desesperadamente que ella estuviera feliz de verlo.

    Carmela nunca respondió, pero desde el momento en que salió de Nueva York había estado rezando para que ella estuviera esperando en el muelle. Cuando desembarcó en Lima. Ripley examinó ansiosamente a la multitud, pero nunca encontró la cara encantadora de Carmela. Pronto se enteró de que su señorita era una señora, casada y con dos hijos.

    Descaradamente, Ripley confesó todo esto a sus lectores. "¡Ay de mí!", Escribió, sonando como un niño de mal humor con sentimientos de prisa, como Demon Dug. "De hecho, soy un infortunio; nunca tuve suerte".

    Después de la reunión fallida, Ripley estaba decidido a encontrar otra señorita de ojos oscuros. Como un adolescente romántico. estaba de vuelta al acecho.

    En la ciudad sureña peruana de Arequipa, debajo del pináculo humeante del volcán El Misti, se hospedó en una conocida pensión administrada por Ana Bates, una mujer de lengua atrevida, que llamó a todos "Muchachitos" y a quienes los invitados llamaron a Tía. La Quinta Bates , hospedaje que fue un destino favorito de estrellas de cine, escritores y realeza. A Clark Gable le encantaba visitar y beber Pisco Sours; Noel Coward vino para una visita de dos días en un mes.

    Allí, Ripley conoció a la sobrina deslumbrante de Batess, Consuelo, que en español significa "descanso y alivio de la pena". A los dieciocho años tenía la mitad de su edad, era tímida y hermosa, y "elegante y encantadora", escribió Ripley en su diario, habla español, es como un arroyo ondulante, y su inglés es una dulce melodía ".

    Una noche, él y Consuelo ascendieron al jardín de la azotea y miraron hacia El Misti, iluminado por la luna. Ripley le dijo a Consuelo que el volcán le recordaba al Monte Fuji en Japón, y cuando ella le preguntó cuál era más hermoso, él confesó que prefería el Fuji.

    "Nunca podría mentirte", le dijo. "Y, por cierto, también soy un buen mentiroso”.

    Más tarde, Ripley describió la escena en la encima del Misti,  en un envío a casa, diciéndole a los lectores cosas que debería haberle dicho a Consuelo: 

    "Ella es modesta e inmaculada y cuando, habla contigo, hormiguean lunas de culpa que se deslizan por tu columna vertebral, aunque no hayas hecho nada. mal; y te sientes avergonzado de la vida que llevas, aunque no es asunto de nadie más que de ti".

    Los lectores podrían haber encontrado extraño y un poco espeluznante leer tales revelaciones confesionales de un periodista, pero se vio incapaz de ocultar sus búsquedas románticas desesperadas y casi juveniles: signos tempranos de una semejanza, una honestidad sin filtro y una ingenuidad que se haría sentir él a los lectores. A Curious Man The Strange And Brilliant Life Of Robert Believe It Or Not .Ripley, de Neal Thompson 2013.


    Robert Riplay


    ***************************************************


    Denman Waldo Ross.

    ************

    Correspondencia intelectual.

    El pintor  norteamericano Denman Waldo Ross(1853-1935) , coleccionista de arte y estudioso de la historia y la teoría del arte estadounidense. Fue profesor de arte en la Universidad de Harvard y miembro del Museo de Bellas Artes de Boston. Ross también fue miembro de algunos de los círculos internos de élite de Boston, y se sabe que se ha codeado no solo con otras personas prominentes asociadas con el Museo de Bellas Artes y el mundo del arte, sino también con personas como Louis Brandeis, John Singer Sargent , Joseph Lindon Smith, Isabella Stewart Gardner y varios miembros de las familias más prominentes de Boston.

    Una carta en especial dirigida a la destacada coleccionista de arte estadounidense, filántropa y mecenas de las artes, quién fundase el Museo Isabella Stewart Gardner en Boston. , se conserva  en el museo de manera digital , dicha carta fue escrita desde la Quinta Bates en Arequipa Perú. La misma que se puede apreciar en  esta dirección. https://www.gardnermuseum.org/experience/collection/31325#


    Isabella Stewart Gardner


    ******************************************************
    Margaret Rose Preston.

    *********

    Margaret Rose Preston (29 de abril de 1875 - 28 de mayo de 1963) fue una pintora, fotógrafa  y grabadora australiana considerada una de las principales modernistas de Australia de principios del siglo XX. Entre sus fotografías ubicamos una que muestra a la "Quinta Bates"en el album: The Americas, Peru, Ecuador, Guatemala, and California, 1937.



    ****************************************************



    *****

    Otra distinguida visitante fue Ellen F. O'Connor  profesora de arte en el sistema de Escuelas Públicas de Boston Estados Unidos, enseñó en Prince School y más tarde en West Roxbury High School. Además de su trabajo como educadora, fue una apasionada participante de la vida cultural de Boston. Era una cantante talentosa, solista en Mission Church y miembro de Handel and Haydn Society, y también daba una conferencia anual sobre arte irlandés en la Biblioteca Pública de Boston.

    Una ávida viajera del mundo durante toda su vida, aprovechó una política progresista de las Escuelas Públicas de Boston para tomarse dos años sabáticos para viajar, estudiar y aprender sobre otras culturas. Su enriquecimiento personal sirvió para inspirar a muchos de sus alumnos durante el transcurso de su larga carrera. En una foto de su archivo podemos ver la entrada de la Quinta Bates en 1929.




    *****

    En La Quinta Bates también se hospedo la  célebre poetisa norteamericana Harriet Monroe.

    La poetisa norteamericana en  su visita a Sudamérica y procedente  de Buenos Aires, quiso visitar Machu Picchu en Cuzco, pero en pleno viaje y en su pasó por la ciudad de Juliaca, le sobrevino  un derrame cerebral, por lo que fue trasladada de emergencia a nuestra ciudad, luego de hospedarse en la Quinta Bates y ante la gravedad de su estado,  fue llevada a una clínica donde trágicamente falleció un 26 de septiembre de 1936, fue sepultada en el Cementerio General de la Apacheta.





    **********************************



    ******************

    El escritor norteamericano John Sayle Jr. dedica el capítulo 5  de su libro "Along the peruvianas Andes" (1953), a la "Quinta Bates", titulado: Quinta Bates and the Misti climb .




    [...]La Quinta Bates y la Ascensión al Misti

    En el camino de regreso al hotel, me detuve en Quinta Bates para preguntarle a Consuelo si me tendrían unos bocadillos mañana por la noche. Ella arreglará todo, tanto la comida como el agua. No hay agua allá arriba en las laderas del volcán.

    15 de abril. Una parada en el Hotel Arequipa siempre resulta en una estadía agradable, pero para compartir mi entusiasmo por el área de Arequipa, uno debe pasar un tiempo en Quinta Bates. Estaba lleno todo el día de ayer después de la luna de miel, así que esta mañana solo tengo que comer y luego seguir mi camino.

    Llegué a la Quinta a eso de las ocho y cuarto y todavía no he desempacado. Tengo una habitación en el último piso, en la terraza de la azotea. La vista de Misti es mejor que la que tenía en el hotel. Además, puedo ver más de Chachani y Picchu que antes. Ahora para desempacar.

    Di un paseo temprano por los jardines; El aroma de las rosas es tan fragante como siempre. No puedo pasar demasiado tiempo admirando la Quinta ahora, ya que tengo algunos artículos de comida para recoger para la escalada de mañana. El sol naciente aquí en la terraza es grandioso, pero eso puede esperar.

    "La Tía" asomó la cabeza por mi habitación antes de que yo comenzara a ir al centro. "Hello, Tía", le dije, "me he mudado". "Esta es tu casa, Sonny", respondió la Tía, mientras avanzaba por el pasillo. Todos los hombres entre las edades de ocho y ochenta son "Sonny" (muchacho) para la Tía, que es la viuda estadounidense de un ingeniero inglés y ha vivido aquí en Arequipa durante cincuenta años. La Tía tiene unos ochenta y cinco años. Antes de la construcción del Hotel Arequipa, todos los visitantes de Arequipa se hospedaban en la Quinta. En una visita anterior, La Tía había sacado los viejos libros de visitas un día. Los que vi se remontan a alrededor de 1925. Busqué a Richard Halliburton y descubrí que estaba aquí en octubre de 1928; había escrito algo sobre "esa buena niña”. Busqué a Hiram Bingham, pero los libros no se remontan lo suficiente.



    De vuelta de mis compras de último minuto, estoy una vez más en la terraza de la azotea, a solo unos pasos de la puerta de mi habitación. Chachani, Misti y Picchu Picchu se extienden ante mí en un panorama magnífico. Hace días me quedé sin nuevos adjetivos para describir la vista de estas montañas, pero magnífico es probablemente el mejor. Todos los picos ahora están llegando a las nubes, las únicas nubes, en el soleado cielo de Arequipa. Mis zapatos de escalada acaban de engrasarse y se están secando al sol junto a mi silla.

    A última hora de la mañana, La Tía estaba bastante molesta por algunos acontecimientos imaginarios. En mis visitas anteriores, La Tía siempre había estado preocupada por los ladrones que entraban por la noche, pero ahora parece tener ladrones corriendo por el lugar incluso durante el día.
    Misti, el gran perro de la Tía, acaba de entrar a mi habitación y se está acomodando en el suelo. En la Quinta no se cierra la puerta al salir de su habitación; De hecho, casi la única vez que cierro mi puerta es por la noche.
    He estado en la terraza tomándome una foto con el Misti al fondo, algo para enviar a casa como una típica escena de relajación de Quinta Bates. El otro Misti todavía está estirado en el suelo. No ha mostrado la menor señal de movimiento en la última media hora. Supongo que decidió quedarse por la tarde.


    La Quinta Bates alrededor de los años 40.

    ********************

    El señor Arenas estuvo aquí justo antes de las cinco en punto. Todo está preparado para mañana: comenzamos desde aquí a las siete de la mañana y nos dirigimos al Misti. Habrá un burro para empacar nuestro equipo para dormir y caballos para que podamos montar. Manuel está preparando dos docenas de sándwiches y además habrá bollos y queso. Tengo entre mis compras plátanos, albaricoques secos, cocinas y barras de chocolate. La "expedición" debe estar bien alimentada. Llevamos cuatro botellas grandes de agua mineral y una botella de café concentrado.

    De nuevo en el techo, estoy escribiendo mientras admiro los últimos rayos de sol que se reflejan en la cumbre de Misti. Durante los próximos dos días, estaré allá arriba familiarizándome íntimamente con el volcán que he estado admirando desde la distancia durante tanto, mucho tiempo. Estoy seguro de que el Misti no me decepcionará.[...]

    [...]24 de abril. Ya es hora de que continúe mi descripción de la Quinta. Desde el exterior, un muro de tres metros de altura mantiene invisible a la Quinta de la calle Jerusalén; solo a través de la gran puerta se puede ver desde la acera. Enormes puertas de madera, cerradas por la noche, pueden bloquear completamente este agujero en la pared formada por la puerta. En el interior, toda la pared está cubierta de hiedra, y esto se puede ver colgando sobre la parte superior de la pared desde el exterior. Justo dentro de la entrada, hay una puerta de hierro que impide el acceso al paseo principal, que está rodeado de setos de alheña.


    Foto postal, de alrededor de los años 40.

    *****************

    En la esquina delantera derecha, hay dos bungalows, cada uno con dos habitaciones y un baño. La parte delantera del patio está ocupada con jardines de flores, y la sección más cercana a la casa tiene césped de buen tamaño. Todo el patio está parcialmente sombreado por una gran cantidad de árboles de todos los tamaños y descripciones. Los árboles favoritos de Tía parecen ser las tres magnolias, porque las menciona cada vez que vengo a Arequipa. Más cerca de la Quinta y en el mismo lado que los bungalows hay una casita de varias habitaciones, siempre llamada Casa Chica, nunca se menciona en inglés. 

    Los jardines y los céspeds están todos delimitados por geranios y setos; Las sillas y mesas están dispersas por todo el patio, lo que permite disfrutar de los diversos lugares con total comodidad.
    Muchos de los árboles son impresionantes, pero una de las tres palmeras siempre me llama la atención. Aunque es una palmera tipo "rechoncha", es un asunto imponente, de unos treinta pies de altura y que tiene aproximadamente la misma extensión. Está en el centro izquierdo del camino de entrada.

    Este paseo conduce a las escaleras delanteras de la Quinta, una casa vieja y desordenada que se extiende a lo largo de toda la parte posterior de la propiedad; debe extenderse unos doscientos pies de un extremo al otro, pero solo tiene dos habitaciones de ancho. No hay patio trasero; toda la parte trasera de la casa bordea una calle trasera.

    Inmediatamente al final de la escalera delantera está la sala o sala de estar. Aquí nuevamente el inglés nunca se usa; siempre se llama la sala. Un porche se extiende a lo largo de la sección frontal principal de la Quinta, y se eleva con una sala de sol en cada extremo, el que está en el extremo izquierdo tiene un techo de vidrio y ofrece una excelente vista de la floreciente buganvilia en el borde de la terraza superior. Hay una pintura en esta sala que siempre admiro. Es la parte principal de la iglesia de San Cristóbal en Cuzco, con indios en traje nativo en la plaza en primer plano. Hay varias ollas y frascos grandes y brillantes de cobre alrededor de esta habitación, y las flores de buganvilia cuelgan en viejas ollas de cobre. Las habitaciones se ramifican en la parte interior de esta sala de sol con techo de vidrio, y el comedor y la cocina se extienden hacia el Chachani.

    El comedor está revestido de paneles, y aquí los invitados se sientan alrededor de cuatro mesas redondas y dos más pequeñas y cuadradas. En la actualidad hay pocas personas aquí en la Quinta, por lo que solo dos de las mesas están en uso. La mesa de la Tía está en la esquina delantera izquierda cuando uno entra desde la sala de sol, y su silla es un sillón especial con respaldo de cuero en la esquina. He estado sentado en esta mesa la mayor parte de mi estadía. Me siento frente a la Tía al otro lado de la mesa. En la pared de arriba, hay una pintura de un indio en un chullo mirándome. Se parece a Víctor Mature con el ceño fruncido, así que es bastante aceptable para mí. Hay luces en las paredes alrededor de la habitación, y una pequeña lámpara en cada una de las pequeñas mesas. Por la noche, cada mesa tiene un candelabro de latón pesado con una vela encendida. Una pintura inacabada de George Washington adorna la pared exterior. Al otro lado de la pared opuesta hay un enorme tapiz nativo. Una pintura religiosa cuelga sobre el aparador en el otro extremo de la habitación.

    En una esquina del comedor hay una pequeña biblioteca, con pinturas religiosas y fotografías antiguas en las paredes. La cocina se bifurca en la otra esquina. Aquí también está el pequeño patio con el geranio de doce pies y las escaleras traseras que conducen a la terraza de la azotea.

    La sala de sol en el extremo derecho del porche delantero conduce a las habitaciones en este extremo o la Quinta. Una empinada escalera lleva a uno a los dormitorios desde la terraza de la azotea. 
    Muchas de las paredes exteriores de la Quinta tienen enredaderas de geranio en flor que trepan en el cribado y la celosía. Una flor de pascua espléndida está en flor cerca de la puerta principal de la Casa Chica. De vuelta en Massachusetts, no tenemos palmeras, flores de pascua y cactus que crecen en nuestros patios traseros, por lo que estoy muy entusiasmado con todo esto.[...]

     

    **************

    [...]2 de mayo. He dejado una descripción de la sala a propósito hasta la última parte de mi visita aquí en Quinta Bates para absorber todos los detalles lo más completamente posible. La sala, al frente de los escalones de la Quinta, era originalmente un patio abierto. La Tía hizo una sala de estar aquí después de comprar el lugar.

    Una chimenea domina un extremo de la habitación; un fuego de yareta vagabundos aquí en la noche. El Misti generalmente se puede encontrar acurrucada en el gran sofá a esa hora del día. Sobre la chimenea cuelga una gran pintura de tres de los hombres más feos que he visto; están vestidos como hombres del campo y son acompañados por un perro. De vuelta a la derecha, dos chicas y varios lamas cruzan el puente. La pintura debe ser de cuatro por cinco pies.


    Las ventanas de cuatro pies de altura se extienden por toda la parte delantera de la sala, una pequeña porción de esta sala sobresale un par de pies en la parte central de este lado. El sofá y las sillas cerca de la chimenea son bastante modernos, pero el resto de los muebles son bastante viejos. Un sofá y sillas de la variedad Gay Nineties se sientan en la parte trasera de la habitación. Pinturas religiosas, muchas en marcos de hojas de oro viejo, salpican las paredes restantes. Los estantes de pan de oro muestran fotografías en algunas de las paredes; algunas de ellas son fotos autografiadas o bocetos de varias celebridades que se han quedado aquí en el pasado. Un viejo cofre de cuero colonial labrado se sienta cerca de la entrada. Un dormitorio con baño privado, uno de los pocos en la Quinta, abre la sala.

    Estaba terminando las cosas en Paucarpata esta tarde. Encontré un primer plano aparentemente bueno para un panorama de tres tomas de Chachani y Misti. Es bastante difícil maniobrar para obtener un buen primer plano de la "llama", pero logré obtener un ángulo justo en una toma de color de gran angular. La cruz simbólica en el costado de la iglesia es la mejor y más completa que he visto en Perú.[...]

    ******************************




    Actualmente, tras la muerte de Ana Bates  el 2 de abril de 1953, lo que antaño solía ser el mejor lugar de hospedaje de personalidades terminó como un simple lugar de departamentos, atrás quedaron los bellos jardines y la rica historia de uno de los lugares más emblemáticos de  Arequipa de comienzos del siglo XX.



    Quinta Bates , Calle Jerusalén 604.


    ************


    Índice Biografías                    Índice General


    Fuente:


    • El Perú en el Mundo ,  E. Centurión Herrera 1939.
    • The Grace Log, Volúmenes26-29. W. R.Grace & Company, 1951.
    • Along the peruvianas Andes , John Sayle Jr 1953.
    • A Curious Man The Strange And Brilliant Life Of Robert Believe It Or Not .Ripley, de Neal Thompson 2013.
    • https://www.gardnermuseum.org/experience/collection/31325#
    • Imagen de portada: Fotografía coloreada digitalmente que muestra a la calle Jerusalén, vista de la Quinta Bates. Base fotográfica: Foto de alrededor de los años 40.