馃敶 Arturo Villegas Romero
脥ndice
Datos Biogr谩ficos
Manuel Arturo Gregorio Villegas y Romero, fue hijo de Alberto Villegas de la Cuba y Carmen Romero Bustamante de Villegas. Nace el 24 de diciembre de 1923 en una casa de la calle Zela en la ciudad del Misti. Tuvo ocho hermanos. Su padrino fue el Cardenal Juan Gualberto Guevara, quien al enterarse de su martirio escribi贸 a sus padres:
"Me imagino lo que t煤 y Carmen estar谩n sufriendo; tu dolor es justo, pero debe ser templado por la resignaci贸n cristiana. Debes mirar este triste suceso como una prueba que Dios ha querido enviarte para que saques provecho de ella, lo mismo digo a Carmen y lo mejor que pueden hacer es ofrecer al Se帽or, autor y due帽o de la vida de los hombres, es ofrecer sus sufrimientos en sufragio del alma del difunto. La fe, m谩s que ning煤n otro recurso, debe ser tu consuelo en estos trances doloroso de la vida".
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Casa del Moral, con imponente tallado, llamada as铆 por un 谩rbol de moras que perfumaba y actualmente perfuma con el aroma de sus frutos el patio principal. Muy visitada, en su ni帽ez y adolescencia, por Arturo Villegas Romero y sus hermanas, pues, en ella resid铆a el cercano pariente don Eduardo Villegas Valdez propietario, en ese entonces, de la afamada casona.
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Trayectoria
Estudi贸 la primaria en la Escuela Normal dirigida por los hermanos de La Salle . La primera comuni贸n la recibi贸 en la iglesia de San Agust铆n. La secundaria la hizo durante cuatro a帽os en La Salle y el 煤ltimo en el Colegio San Francisco de As铆s. Destac贸 como gran alumno buen compa帽ero y l铆der indiscutible.
Ingres贸 a la Universidad de san Agust铆n a los 15 a帽os de edad y se gradu贸 de Bachiller en Humanidades a los 19 a帽os; en 1942 sustent贸 la tesis "El movimiento de T煤pac Amaru II y la participaci贸n ind铆gena en la gesta de la Emancipaci贸n del Per煤" (La Colmena, reeditada por la UNAS en el 2000).
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En 1945 recibi贸 el t铆tulo de Doctor en Letras, Historia, con la tesis "Apuntes de un decenio de la Historia de Arequipa 1830-1840" (Texto publicado posteriormente por la Fundaci贸n Gloria, Arequipa, 1985). En 1946 se grad煤a como Bachiller en Derecho con la tesis "La prescripci贸n adquisitiva en el C贸digo Civil Peruano", abogado en 1947. En diciembre de este mismo a帽o se gradu贸 como doctor con la tesis "Nacionalidad de las sociedades mercantiles".
El Dr. Eusebio Quiroz nos da un retrato de su catolicismo:
"Sus o铆dos estuvieron abiertas tanto para Dios como para los hombres, los prest贸 para el pobre como para el rico; para el obrero como para el capitalista, para el ni帽o como para el anciano; para la viuda como la casada; para el estudiante, como para el profesional; para uno como para todos. La fe que profes贸 desde sus tiernos a帽os, jam谩s fue eclipsada por el escepticismo, ni su moral mancillada por la corriente epic煤rea.
Pues, habiendo ca铆do en la cuenta de que fuera del dogma de Cristo, no hay cosa m谩s cierta ni mejor, supo apreciar su dignidad de cat贸lico romano; y como tal, se condujo en todos los instantes de su vida, tanto individual como social. Como exponente de la primera es digna de anotarse la uni贸n cotidiana con Jes煤s Sacramentado, a quien varios a帽os, sin reticencias y oblicuidades, sigui贸 y defendi贸 en la falange arrolladora de la Acci贸n Cat贸lica, cuya insignia siempre fue su orgullo, sobre todo en los actos p煤blicos externos de nuestra santa religi贸n. Testigo de ello, es el pueblo de Arequipa…Como jurista cat贸lico, dio preferencia a la defensa de los derechos de los obreros, seg煤n las normas de las enc铆clicas sociales de los Papas" (EQPS "Arequipa del 50" UNSA, Arequipa 2000, 77-78
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El mismo J.L. Bustamante y Rivero en carta escrita desde Nueva York el 9 de julio de 1950:
"La inspiraci贸n cristiana de la vida de Arturo Villegas, le prest贸 coraje para el 煤ltimo de sus gestos de ciudadanos que lucha por un alto ideal, debi贸 darle tambi茅n en su fatiga de moribundo la confianza apacible de quien cumple un deber. Y, por eso, en la tumba en que sus restos reposan, la plegaria de los que, como 茅l creyeron, ser谩 la llama perpetua que alumbre su eterna paz" (EQPS, op. cit) Cit 46-47).
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Como miembro de la Acci贸n Cat贸lica cabe destacar que la propia Municipalidad Provincial le condecor贸 con un diploma en 1943. En 1944 viaj贸 como presidente de la delegaci贸n que fue a Chile representando a la AC de Arequipa. A inicios de mayo de 1945 organiz贸 la Convenci贸n Local de J贸venes Cat贸licos de Arequipa. En 1946 particip贸 en Lima de la Segunda Semana Internacional de Universitarios Cat贸licos. Durante este periodo fue presidente de la UNEC y de la Juventud Cat贸lica Masculina de Arequipa; tambi茅n particip贸 en la Democracia Cristiana y su Secretario General H茅ctor Cornejo Ch谩vez lo consideraba como "el primer m谩rtir de la causa".
En 1948 fue gerente de "El Deber", jefe de redacci贸n del semanario "Sur "Ser谩 profesor en su antiguo Colegio de La Salle, preside el grupo cultural Toribio Pacheco.
En el campo profesional era miembro del directorio de Aerov铆as Nacionales del Sur, secretario de la librer铆a Ibero-Americana y abogado contratado por el Municipio para asuntos de la lotizaci贸n de Miraflores. Fue Inspector de Rentas Legales de la Casa de Pr茅stamo y de la Biblioteca Municipal. Como abogado apoy贸 a los m谩s pobres, especialmente los obreros de la Juventud de ]Obreros Cat贸licos.
Dibujo a tinta del artista arequipe帽o Jorge Cyran, en la Obra : El 煤ltimo Montonero de Alfonso Bouroncle Carre贸n del a帽o 1982.
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La Revoluci贸n del 50
La tarde del 13 de junio de 1950, a las 6, llama desde el estudio de Mario Polar comunicando a su padre que no se preocupe. Arequipa, sin embargo, ard铆a en llamas y el ej茅rcito avanza por Tingo y se dirige al Cuartel Salaverry para tomar la ciudad. A las 7 de la noche el Cuerpo Consular llama a Francisco Mostajo para llegar a un acuerdo y se conviene en designar un grupo parlamentario formado por Javier de Bela煤nde, Arnoldo Guill茅n, Carlos Bellido y Arturo Villegas. A las 8 de la noche salen de la Municipalidad portando una bandera blanca, un mandil de m茅dico.
Tras caminar unos 30 metros, los soldados disparan contra los j贸venes hiriendo a Carlos Bellido. Arturo se ech贸 en el pavimento y al escuchar la repetici贸n de las descargas levanta la bandera; en ese momento otra descarga le hiere mortalmente haciendo que rodase por el suelo. Mostajo escribi贸 en su poema: "La Religi贸n, la Patria y tu Arequipa tu entra帽a sacud铆an en se铆smo. Aun en la urbe tu voz no se disipa y hoy vemos en la muerte tu hero铆smo". Arturo Villegas falleci贸 a las 8 y 20 de la noche, del 14 de junio de 1950 .
[...] Los cad谩veres fueron enterrados en forma compulsiva y clandestina en la llamada Pampa de Polanco, sin aviso previo a familiares, con seguridad para esconder el vergonzoso asesinato de los ca铆dos. La autoridad pol铆tico militar orden贸 que en medio de la oscuridad se procediera a cubrir de tierra los restos de las decenas de m谩rtires que se inmolaron en las horas de lucha.
La familia Villegas Romero enterada, a temprana hora de la ma帽ana del 15 de junio, de la muerte del ser querido, iniciaron una infructuosa b煤squeda. Mercedes, la hermana menor, quien fue la primera de la familia en recibir la infausta noticia se dirigi贸 al Hospital Goyeneche y all铆 busc贸 al doctor Mariano Palao, pariente de los Villegas y ambos recorrieron los diferentes pabellones del nosocomio. No encontraron al ser querido, ni como herido o cad谩ver. Al promediar el medio d铆a, don Alberto, su padre, fue notificado que el cuerpo inerte de su hijo estaba en una sala mortuoria. Lo encontr贸 con muestras evidentes de haber sido desenterrado.
Arequipa, conmovida, tom贸 conocimiento de la tr谩gica suerte de su joven esperanza intelectual. Las honras f煤nebres fueron solemnes y llenas de una corriente de repudio a los autores de tan execrable crimen. El velatorio fue en la casona de los Villegas Romero de avenida Goyenechc 325 y el d铆a s谩bado, a las tres de la tarde, el f茅retro fue llevado en hombros por el pueblo y las diversas delegaciones de las m谩s importantes instituciones y destacadas personalidades: Colegio de Abogados, Asociaci贸n de Comercio e Industria, Juventud Obrera Cat贸lica, Colegio La Salle, diario El Deber, Acci贸n Cat贸lica, Club Arequipa, Club de Leones, Liga Democr谩tica Nacional; Asociaci贸n Cultural Toribio Pacheco, Sociedad El茅ctrica del Sur, Banco de Cr茅dito, Ferrocarriles del Sur, Club de Leones, Centro Federado de Periodistas, y se suced铆an portando los cordones de luto varios ciudadanos en representaci贸n de otras tantas prestigiosas asociaciones: Presidente de la Sociedad de Beneficencia P煤blica, doctor Roberto Chocano; Fiscal de la Corte Superior de Justicia doctor Manuel E. de Pi茅rola; Presidente del Club Arequipa se帽or Jorge San Mart铆n; Director del diario El. Deber can贸nigo Erasmo Hinojosa; Presidente de la Asociaci贸n de Comercio e Industrias doctor Ra煤l Benavides; Director del Colegio La Salle hermano Justo; Director del diario El Pueblo se帽or Edilberto Zegarra Ball贸n; Presidente del Centro Federado de Periodistas, doctor 脕ngel Vinicio Cornejo. La mujer arequipe帽a de la Acci贸n Cat贸lica se hizo presente y en momento oportuno cogieron los cordones: Rosa Corzo de Chavaneix, Mar铆a Belaunde Somocurcio y Antonieta Corzo L贸pez de Roma帽a.
El cortejo f煤nebre congreg贸 a centenares de personas. Avanzaba silenciosamente por la amplia avenida Goyeneche y llegaron hasta las inmediaciones del Estadio Melgar. Desde all铆, en carroza, el f茅retro fue trasladado al cementerio La Apacheta. No obstante la abierta amenaza de las autoridades para evitar que concurran un n煤mero importante de ciudadanos, all铆 estuvieron los amigos, amigas, profesionales, estudiantes, obreros y el pueblo, algunos lloraban y otros en actitud altiva reaccionaban impotentes en espera de que en ning煤n momento llegara a imperar la justicia. El funeral fue permitido bajo el compromiso que se abstuviera de pronunciarse discursos que por justicia y admiraci贸n los merec铆a el occiso. La tropa distante observaba lo que acontec铆a presta a intervenir si se produc铆a cualquier muestra de repudio al gobierno.
Los restos de Arturo Villegas reposan en el Pabell贸n San Marcos N潞 41 en el cementerio General de la Apacheta.
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Luis Rey de Castro, en un conmovedor relato, publicado en el semanario El B煤ho de Arequipa el a帽o 2000, escribi贸:
“Pocos minutos despu茅s, Arturo Villegas Romero, mi entra帽able amigo, la persona que me abri贸 las puertas del periodismo y mi vocaci贸n profesional, estaba muerto en mis brazos. Guard茅 su billetera, su reloj, su pluma fuente, aquella con la que escrib铆a su Historia de Arequipa, para entregarlos a sus padres” .
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Mostajo dej贸 escrita su admiraci贸n y, a la vez, su pesar por el desenlace de la misi贸n que encomend贸, en el sentido poema:
El Parlamento Tr谩gico
Eran cuatro. Los cuatro iban de
Parlamento del pueblo.
Cu茅ntelos el que los quiera,
Que han de sobrarles los dedos.
Eran Belaunde y Villegas
-los dos doctores primeros-
Bellido y Guill茅n los otros,
y est谩 el n煤mero completo...
Alcen la bandera luego
Villegas arrodill谩ndose
para recoger el lienzo,
y las balas homicidas
de las armas del Ej茅rcito
se clavaron en su cr谩neo,
en busca de su cerebro.
Cay贸 muerto como un h茅roe...
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Fuente:
- Javier Diaz Orihuela. El Triunvirato de la Libertad. 2003.
- http://peru-cristiano.blogspot.pe/2015/02/arturo-villegas-romero-1923-1950-martir.html
- Villegas muerto en mis brazos. Luis Rey de Castro. Semanario El B煤ho. Arequipa, 16 de julio del 2000.
